Qué ver y hacer en el barrio de Triana en Sevilla
Al otro lado del río se encuentra un barrio con un carácter peculiar: Triana. Ningún viaje a Sevilla podría considerarse completo sin pasar por aquí
Aunque la capital andaluza no está en la costa, durante el Siglo de Oro fue el puerto más importante de España. En efecto, la famosa expedición de Magallanes y Elcano zarpó de los muelles de Triana.
Este barrio a orillas del Guadalquivir es también conocido por la tradición flamenca, los bares de tapas y por ser el punto de partida de los cruceros fluviales. Sin duda, conocerlo es una de las cosas imprescindibles qué ver y hacer en Sevilla.
¿Cuánto tiempo se necesita para visitar Triana?
En mi opinión hay que dedicarle por lo menos una media jornada. Es un barrio con mucho encanto y merece la pena tomarse la visita con calma. Al ser un destino muy famoso de las rutas de tapas puedes llegar a la hora de comer y quemar unas cuantas calorías con un paseo en la orilla del Guadalquivir.
1. Pasea por el Castillo de San Jorge
La fortaleza se encuentra nada más cruzar el Puente de Isabel II (conocido también como pueste de Triana) y vigila el río desde el tiempo de los Visigodos. Sus orígenes son algo inciertos aunque se piensa que fue erigido para defender la ciudad de los ataques de Leovigildo, un rey godo que se distinguió por sus exitosas campañas militares.
El Castillo de San Jorge alcanzó su auge durante el siglo XV, el denominado “Siglo de Oro”. En efecto, la Inquisición estableció su cuartel general en la fortaleza en 1481 y ocupó sus ambientes hasta 1785.
Parte del Castillo de San Jorge fue demolido en la época decimonónica y lo que queda hospeda un centro de interpretación de las ruinas y de la represión religiosa.
Información práctica
- Dirección: Plaza del Altozano s/n
- Horario: de martes a sábado, de 10:00 a 13:30 y de 17:00 a 19:30. Los domingos y festivos se puede visitar de 10:00 a 13:30
- Precio: la entrada es gratuita
2. Admira los mejores bailadores de la ciudad
Si estás buscando un show de flamenco en Sevilla, estás en el barrio correcto. Se dice que los inventores de este arte residían en Triana ya que hospedaba una gran comunidad gitana. Para ir a lo seguro te recomiendo acercarte al Teatro Flamenco Triana que **ha ganado el “Travelers’ Choice” de TripAdvisor en 2020.
Hay espectáculos a diario en dos horarios: a las 19:30 y a las 21:00. El edificio se encuentra en calle Pureza 76, a poca distancia del Guadalquivir y de la Capilla de los Marineros. Si no encuentras sitio puedes optar por otros tablaos como Teatro Pura Esencia Flamenco (Calle Betis 56) y Baraka (Calle Pureza 107).
3. Descubre los patios de Triana
Este barrio concentra el mayor número de patios y corralas de toda Sevilla. Son muy bonitos y tienen el típico encanto andaluz. Proyectan sombra y están salpicados de plantas trepadoras y de vasos.
En algunas ocasiones, el ayuntamiento organiza unas visitas a ocho patios de Triana: Cerca Hermosa, Corral de Los Corchos, Casa Quemada, Hotel Triana, Corral Largo, Patio de las Flores, Corral San Jorge y Corral de la Encarnación. De costumbre, este evento toma lugar durante el otoño.
4. Prepara una ruta de tapeo
En Andalucía el tapeo es un estilo de vida y su capital no es una excepción. Triana hospeda un sinfín de bares y tascas donde comer bien sin gastarte un ojo de la cara y el listado de abajo te desvela los mejores:
- Casa Ruperto, el templo de las codornices. Es un bar sencillo con un clásico toldo rojo y una inscripción blanca. Sus famosas aves se crían en la provincia de Lérida y te aseguro que están riquísimas. También te recomiendo probar el guiso de caracoles y cabrillas, un serranito o la pringá, un bocadillo elaborado con la carne del puchero (Avenida Santa Cecilia 2)
- Bar Juan Carlos, el paraíso de los queseros. Su oferta de productos lácteos es impresionante - hay más de 100 variedades - y es completada por patés de caza, cecina, pulpo a la gallega y otros manjares. También destaca por sus excelentes cervezas nacionales e internacionales (Calle Febo 6)
- Freiduría Reina Victoria, el lugar ideal para comer bacalao bien rebozado además de chipirones, adobo, calamares y mucho más. Es un establecimiento sencillo con amplios salones y precios asequibles (Calle Rodrigo de Triana 51)
- Bar Salomón, el referente para pinchos y carnes a la brasa (Calle López de Gómara 11)
- Las Golondrinas, una etapa obligada en Triana. Hay dos bares bajo el mismo nombre: el primero es más tradicional mientras que el segundo tiene un estilo contemporáneo. Sus especialidades son las puntas de solomillo, los champiñones a la plancha, la carrillada ibérica y los caballitos de jamón, una rebanadas de pan freídas y cubiertas con suculento jamón (Calle Pagés del Corro)
- Blanca Paloma, un clásico del barrio. Su fama se debe a los bocaditos de mejillones, unas croquetas marineras muy sabrosas. Otros platillos a probar son las berenjenas rellenas de gambas, los boquerones o las papas aliñadas con melva (Calle San Jacinto 49)
5. Navega en el Guadalquivir
El Guadalquivir es el único río navegable de España. Sus aguas plácidas son el reclamo para miles de sevillanos y turistas que se acercan a las orillas para practicar piragüismo, pasear o subirse a un crucero fluvial.
La mayoría de los paseos en barco por el Guadalquivir salen de Triana. Unos minutos después de zarpar, los cruceros pasan por debajo de un icono de Sevilla, el Puente de Isabel II.
No suelen ser unos viajes muy largos ya que se centran en el canal navegable construido durante el reinado de Alfonso XIII. Dependiendo de la cantidad desembolsada, tendrás derecho a una bebida (copa de vino, cerveza, refresco, etc.).
Sin embargo, una nueva práctica ha ido ganando adeptos en los últimos años. Naturalmente estoy hablando del Paddle Surf o SUP, una disciplina que consiste en desplazarse en una tabla de surf erguidos, impulsando cada movimiento con una pala. Este deporte nació en los años sesenta en Polinesia y poco a poco ha ido ganando adeptos en los demás continentes.
El equilibrio es fundamental pero con un poco de práctica podrás moverte fácilmente desarrollando al mismo tiempo tu musculatura. En Triana puedes optar por Sup Guadalquivir (Mercado de Triana puesto 29) o Paddle Surf Sevilla (Calle Betis 19).
6. Visita el Centro de Cerámica
La industria alfarera está ligada con hilo doble a Triana. En esta parte de la ciudad se concentraba la producción de cerámica y el centro de calle Antillano Campos hace revivir la tradición artesanal.
Aprenderás los vocablos del oficio y verás los hornos del siglo XVI y una selección de piezas estilosas y coloridas.
El Centro de Cerámica se encuentra a espaldas del Mercado de Triana y abre de 11:00 a 18:00 (de martes a sábado) y de 10:00 a 15:00 (domingos y festivos). El precio es muy asequible - ronda los 2 € - y por lo tanto merece la pena dedicarle un poco de tiempo.
7. Reserva un tour de misterios y leyendas
Triana hospeda el Castillo de San Jorge, una fortaleza que fue sede de la Inquisición desde el siglo XV hasta el siglo XVIII.
Detrás de sus paredes se extorsionaban confesiones con métodos muy poco ortodoxos y fueron muchos los que perdieron la vida tras unas cruentas torturas. El fortín está envuelto en un entramado de leyendas que podrás descubrir reservando un paseo nocturno por Sevilla.
No es sólo el Castillo el protagonista de esta historia. Las visitas guiadas te llevarán en otros puntos del barrio como el Patio de Monipodio, Calle Pagés del Corro (la antigua Cava) o la Capilla de la Virgen del Carmen. Triana está ligada al nacimiento del flamenco y a los viajes marítimos, no faltan historias para contar.
Información práctica
- Duración: 1 hora y media
- Precio: alrededor de 10 €
8. Relájate en una terraza
Triana se encuentra a orillas del Guadalquivir y sus edificios más altos se asoman hacia el casco viejo. Gracias a su posición privilegiada goza de unas incomparables vistas sobre Sevilla. Si viajas a la capital hispalense en verano puedes escapar del calor en las terrazas del barrio.
A continuación encuentras unas opciones en las alturas (o no) que te dejarán sin aliento:
- María Trifulca, el restaurante de la jet set sevillana. No es raro ver algún futbolista u otros personajes famosos y la cosa no sorprende. Cuenta con una amplia selección de platos a base de pescado fresco y marisco como las deliciosas gambas blancas o los manjares de atún rojo. Tampoco faltan las opciones de carne además de pastas, arroces y otros manjares. Desde su terraza se admiran las callejuelas de Triana, la Catedral y la plaza de toros (Plaza del Altozano 1)
- Puerto de Cuba, La Meca de los cocteleros. Su terraza sobre el agua es un mirador privilegiado hacia la Torre de Oro y el lugar ideal para empezar la noche con una copa entre manos (Calle Betis s/n)
- Hotel Ribera de Triana, la elección perfecta para darse un capricho. No hace falta que tengas una habitación para disfrutar de LEVEL 5th, un bar con terraza panorámica, solarium y piscina. Sus mesas y tumbonas de diseño y la cautivadora luz azulada conforman un espacio exclusivo y relajante (Plaza de Chapina s/n)
- Betis 7 Triana Experience, un restaurante a dos pasos del Puente de Isabel II. Sus recetas reinterpretan la tradición andaluza añadiendo toques de oriente, Italia y otras cocinas del mundo. Para alargar la velada y seguir disfrutar del panorama puedes pedir una caipirinha o un Martini (Calle Betis 7)
9. Revive la historia en calle Betis
Es la calle que transcurre paralela al río y su origen data del siglo XVIII cuando se levantó una gran muralla para contener las inundaciones del Guadalquivir. Lo que hoy en día es un concurrido destino de cañas y tapeo, en el pasado hervía de marineros, mercaderes y almirantes.
En esta misma calle se encontraba la Universidad de Mareantes, una escuela que formaba las tripulaciones que viajaban entre la capital hispalense y las Américas. En la actualidad no queda rastro de ella pero en su lugar se encuentra la Casa de las Columnas, un elegante edificio que hoy alberga un centro cívico comunal. Una placa en cerámica recuerda
Tómate tu tiempo para pasear admirando las fachadas coloridas de las casas y el panorama hacia la otra orilla. Por cierto, si te interesan los miradores te recomiendo leer el post sobre las mejores vistas de Sevilla.
10. Entra en la Iglesia de Santa Ana
En el cruce entre las calles Pureza, Vázquez de Leca, Bernardo Guerra y Pelay Correa se levanta un templo con más de siete siglos de historia. Fue construida durante el siglo XIII y originariamente se encontraba fuera de las murallas.
Tras la reconquista, la posterior llegada de los españoles en América y el terremoto de Lisboa, todo cambió repentinamente.
El aspecto barroco dio paso a la mezcla de mudéjar y gótico que podemos apreciar en la actualidad y los hombres que volvían de las colonias .
Si viajas a Sevilla a finales de julio puedes disfrutar de su evento principal: la Novena a Señora Santa Ana. Un consejo: a escasos metros del templo se encuentra De Triana, una tienda con ropa, complementos y objetos ligados a este barrio tradicional.