Más acerca de: Qué ver y hacer en Turín
Turín es la capital de Piamonte, una ciudad ubicada al norte de Italia. Destaca por sus refinados edificios y pintorescas calles, las cuales están llenas de experiencias inolvidables. Puedes realizar recorridos históricos, conocer la incomparable gastronomía piamontesa y regodearte con la belleza que ofrecen los enclaves más famosos. Por ejemplo, no puedes pasar por alto una visita al Palacio Real, el Museo Egipcio y el Palazzo Madama.
Además, las mejores actividades de Turín reúnen experiencias por sus calles, edificios más resaltantes de la corriente artística y secretos del casco antiguo. Por supuesto, una visita a esta ciudad no está completa si no te escapas a la Sacra di San Michele, una belleza sagrada en la cima de una colina. Hay tantas cosas por hacer en este destino italiano, ¡te cuento todas las opciones que no te puedes perder!
1. Disfruta un recorrido por las calles de Turín
Turín es una ciudad italiana muy elegante con una amplia historia, gastronomía, sitios artísticos y eventos de alta categoría. No te pierdas la oportunidad de conocer sus edificios barrocos y los contrastes que hacen especial este rincón europeo. Si no quieres perderte nada, entonces deberías aprovechar una experiencia guiada para conocer sus monumentos, plazas y escondites que la hacen especial. Los lugareños conocen a la perfección los lugares más disfrutables y con mayores opciones de entretenimiento, así que puede ponerte al tanto de qué ver o hacer.
Si planeas estar al menos 2 días en la ciudad, entonces tienes que echarle un vistazo a los imprescindibles:
- Piazza San Carlo: se encuentra en el corazón de la ciudad y durante tu estancia pasarás muchas veces por aquí, ya que interconecta las cuatro arterias principales, conocidas como Via Roma, Via Garibaldi, Via Po y Via Pietro Micca.
- Ristorante del Cambio: un famoso restaurante piamontés que presume sus estrellas Michelín, así como la larga lista de celebridades que han disfrutado una comida en sus instalaciones. Entre ellas destacan Audrey Hepburn, Nietzsche y la familia Agnelli.
- Galleria Subalpina: si quieres viajar en el tiempo, probablemente tienes que echarle un vistazo a esta galería auténtica que se construyó en el siglo XIX. Su estilo renacentista elegante, te recordará a la Galleria Vittorio Emanuele II en Milán.
2. Vive una experiencia gastronómica en Turín
Una actividad auténtica e imprescindible en Turín, es adentrarte en las tradiciones más resaltantes de este perímetro italiano. La mejor forma de lograrlo es con una experiencia gastronómica en la casa de un local. Es ideal para quienes disfrutan conocer una ciudad a través del paladar, ya que un lugareño preparará para ti especialidades de la cocina piamontesa.
Si hay algo que se puede hacer en Turín hasta el cansancio, sin duda es comer. Encontrarás opciones por todos lados, pero nada se iguala a experimentar refinadas recetas hechas con ingredientes de calidad. Generalmente, tendrás que apartarle dos horas a esta degustación. Si tienes poco tiempo y solo planeas estar 1 día en Turín, esta es tu oportunidad de probar:
- Tomini al verde: Italia es famosa por sus especialidades de quesos, este platillo ofrece un queso típico de Piamonte acompañado de una salsa saborizada con aceite, perejil, alcaparras, anchoas y ajo.
- Agnolotti del plin: escapa los límites de lo seguro y atrévete a probar una pasta rellena de carne asada.
- Bonet: por supuesto, el postre no puede faltar y es posible que pruebes uno de los más famosos de la gastronomía local. Está hecho a base de huevos, cacao, café y galletas amaretti. Dichas galletas también son una locura para el paladar, se preparan con almendra y clara de huevo.
Estos son algunos de los platillos que puedes llegar a probar durante esta experiencia, sin embargo ve abierto a sorprenderte con platillos de temporada y sabores explosivos.
3. Sumérgete en un recorrido por el Palacio Real
El Palacio Real de Turín es uno de los espacios más impresionantes, donde podrás disfrutar un itinerario lleno de aprendizaje. Si vas por tu cuenta, asegúrate de llevar un mapa de la estructura porque hay mucho que ver. Se construyó a finales del siglo XVI, por encargo de la dinastía Saboya que reinaba en la época. Hay recorridos guiados desde 51 euros que te permiten evitar las colas a este codiciado edificio.
Aquí no te puedes perder la Scala delle Forbici, una magnífica escalera colorida construida especialmente para la boda del príncipe Carlos Manuel III con Ana Cristina de Baviera. En general, tiene 5 zonas destacadas que no te puedes perder:
- Salas del Palacio Real: tiene tres plantas conocidas como la Sala del Trono donde se resguardan los apartamentos ducales, y la Sala del Baile que fue testigo de fiestas exuberantes. Entre estos espacios se puede apreciar la Cúpula de la Cappella della Sacra Sindone, donde hace años se resguardaba la Sábana Santa donde se envolvió a Jesucristo. Tiene otras salas opulentas como Galleria del Daniel y el Salone degli Svizzeri.
- Armería Real: algunas de las colecciones de armas más antiguas e importantes del mundo se encuentran en este lugar.
- Biblioteca Real: contiene alrededor de 220.000 volúmenes antiguos, así como dibujos de importantes artistas.
- Galería Sabauda: tiene ciento de pinturas que pertenecían a la familia Saboya, sus fundadores.
- Museo Arqueológico: se considera uno de los mejores museos de Turín, tiene objetos de la época romana y tesoros de plata. Se encuentra en la parte subterránea y alberga bustos, esculturas y otros elementos fascinantes.
4. Conoce el Museo Egipcio y recorre más de un siglo de historia
Viaja a Egipto sin moverte de Turín, en una experiencia por este particular museo. Alberga más de un siglo de historia, por ello figura entre las colecciones más importantes del mundo. Dedícale al menos dos horas para explorar más de 37.000 artefactos de valor incalculable. Puedes disfrutar una visita por tu cuenta, pero siempre se encuentra muy concurrida, así que es preferible optar por una experiencia guiada para grupos reducidos sin colas.
De esta manera, podrás apreciar cómodamente los hallazgos, resguardados cuidadosamente en el Museo Egipcio de Turín, que no en vano figura entre los mejores museos de la ciudad. Sus pasillos se encuentran dedicados a la cultura egipcia y puedes aprovechar de apreciar:
- Galería de los reyes: podrás ver fascinantes estatuas de los faraones más conocidos de la historia como Tutankamón, Ramsés II o Amón.
- Ostracon de la bailarina: es una joya resguardada que se cree fue rescatada entre el año 1292 y 1076 a.C. Representa a la bailarina acrobática, una figura de la danza gimnástica del Antiguo Egipto.
- Libro de los Muertos de Luefankh: viaja a la era helenística, para conocer un auténtico papiro que tenía indicaciones sobre cómo sobrevivir en el otro mundo.
5. Explora el misterio del Santo Sudario en la Catedral de Turín
La Catedral de Turín o el Duomo di Torino es un monumento gratuito donde se guarda la Sábana Santa, la cual envolvió el cuerpo de Jesucristo. Se puede apreciar en algunas ocasiones se realizan ceremonias sagradas, conocidas como Ostensión del Sudario Santo. Adicionalmente, el encanto de este edificio sagrado recae en su armoniosa arquitectura, ya que fue labrada sobre los restos de tres iglesias y tiene áreas preciosas como el campanario, la cúpula octogonal y la capilla.
Aquí se encuentran algunas tumbas de la familia real italiana, así como la tumba del beato Pier Giorgio Frassati. Ten en cuenta que la catedral se ubica en el el casco histórico, así que es una maravilla rodeada de monumentos y localizaciones icónicas indispensables en tu travesía por Italia. Si planeas estar al menos 2 días en la ciudad, puedes disfrutar el escenario y aprovechar la Piemonte Card, la cual ofrece acceso gratuito o descuentos a ciertas atracciones del Old Town.
Algunas de las localizaciones que puedes conocer cerca de la catedral incluyen:
- El Museo Egipcio de Turín, motivo más que suficiente para disfrutar un recorrido por el Old Town.
- La Puerta Palatina, el acceso a la antigua ciudad romana, por donde pasarás varias veces durante tu estancia en Turín.
- El Mercado del Balón, un peculiar mercadillo lleno de contrastes, ideal para conocer la ciudad desde otra perspectiva. Generalmente, se celebra cada sábado y tiene zonas de comidas, artesanías, ropa, flores y más.
6. No te pierdas el Museo de Arte Oriental de Turín
El Museo de Arte Oriental de Turín es un rincón con una experiencia que dista de lo tradicional, ya que alberga una de las colecciones de arte asiático más valiosas de Italia. Tiene cinco galerías que puedes explorar a tu ritmo, dentro de una estructura original del siglo XVIII que fue remodelada para crear este museo en 2008.
Es uno de los mejores museos de Turín, ya que podrás viajar por obras japonesas, pakistaníes y chinas. Además, tendrás un vistazo de destacadas pinturas, grabados y otros objetos de arte, como exposiciones artísticas de dragones de tres dedos. Ten en cuenta que el recorrido empieza en sus jardines de sueño, y después se traslada a tres pisos llenos de obras fantásticas. En sus salas podrás ver arte profano, colecciones de arte islámico y disfrutar de los eventos especiales: conciertos y actividades educativas, ideales si estás buscando cosas que hacer en Turín con niños; también talleres de arte, conferencias y más.
7. Adéntrate en el Palazzo Madama de Turín
El Palazzo Madama es un castillo deslumbrante donde puedes dedicarte a disfrutar un recorrido histórico. Se encuentra en la plaza Castello, a poca distancia del Palacio Real. Tiene colecciones de historia y arquitectura, divididas de forma estratégica. Se considera uno de los edificios más elegantes que elude un viaje en el tiempo por varias épocas: medieval, renacentista y barroca. Podrás deslumbrarte con exhibiciones de cerámica, cristalería y ropa de época.
Los mejores buses turísticos de Turín incluyen rutas por este sostificado palacio, así que puede ser una opción a considerar. También hay visitas guiadas que te ahorran las colas y te permiten apreciar su belleza sin aglomeraciones. Un dato interesante es que originalmente era una puerta romana, hasta que terminó convirtiéndose en un imponente castillo. Adicionalmente, aquí se puede visitar el Museo Cívico de Arte Antiguo que alberga cientos de obras de arte.
8. Descubre la belleza arquitectónica de la ciudad
Turín se puede considerar la capital del arte, por ello es interesante contemplar un recorrido por el Art Nouveau o arte moderno de la ciudad. Puedes trazar una ruta por tu cuenta, o bien reservar una experiencia guiada por las corrientes artísticas más importantes. La mayoría de atracciones visuales llevan la firma de Pietro Fenoglio, un maestro arquitecto cuya historia se desvela en los mejores tours locales. Si quieres apreciar ejemplares de edificios emblemáticos, te recomiendo considerar:
- Casa Fenoglio-Lafleur: es uno de los mejores ejemplos del estilo Liberty italiano, una corriente artística que llegó a la capital piamontesa en 1902. Tómate unos minutos para maravillarte con sus grandes ventanales de colores y balcones de hierro forjado.
- Casa dei Draghi: un edificio que mezcla el estilo neogótico con el Art Déco, el cual tiene cinco plantas imponentes que merecen un vistazo.
9. No te pierdas un atardecer en los miradores locales
Por supuesto, no te puedes ir de Turín sin disfrutar un vistazo escénico de su imponente fachada. La capital piamontesa tiene enclaves estratégicos, donde puedes apreciar el colorido atardecer y vislumbrar los edificios más importantes. Una opción poco concurrida es el mirador Monte dei Cappucini, ubicado en una colina de fácil acceso.
Si prefieres una alternativa más cómoda y moderna, entonces debes inclinarte por el mirador de Mole Antonelliana ubicado en el edificio del Museo de Cine de Turín. Puedes subir por un ascensor panorámico, para detallar cada rincón de la ciudad. Otras opciones para obtener vistas en 360° de la ciudad son:
- Basílica de Superga: es una apreciada construcción para los turineses, ya que se encuentra en una colina con vistas privilegiadas. De esta manera, tendrás una experiencia multifacética ya que podrás aprovechar una visita por sus instalaciones, regodearte con las vistas y utilizar el antiguo tranvía de Turín que se emplea para subir.
- Campanile del Duomo: este campanario histórico se construyó en 1468 y es toda una travesía, ya que hay que subir alrededor de 200 escalones. Te prometo que merece la pena, porque la recompensa son vistas de las cúpulas de los principales edificios.
10. Escápate a Sacra di San Michele desde Turín
A tan solo cuarenta y cinco minutos de Turín se esconde la Sacra di San Michele, una experiencia que debes aprovechar si planeas estar más de 2 días en la ciudad. Se trata de un monumento rico en arte e historias, pero debes tener en cuenta que para apreciar su belleza de cerca tendrás que subir al Monte Pirchiriano a casi 1.000 metros de altura. Sigue los mitos que se entrelazan en torno a esta abadía, la cual ha desafiado el tiempo permaneciendo intacta.
La mejor forma de llegar es a través de una excursión guiada, de modo que no tengas que preocuparte por nada. Sin embargo, también puedes combinar un recorrido en tren y autobús para explorar por tu cuenta. En cuanto a las entradas, en la puerta puedes adquirir un ticket individual desde 8 euros para realizar una visita por libre durante 45 minutos aprovechando los códigos QR que desbloquean vídeos explicativos. Algunas de las cosas que podrás ver en este imponente edificio incluyen:
- El Sepulcro de los Monjes, el cual corresponde a los restos de un antiguo templo y de un cementerio.
- La Estatua de Sacra di San Michele, una pieza artística del Arcángel San Miguel donada en 2005 por el escultor Paul dë Doss-Moroder.
- La Escalera de los Muertos, que recibe su nombre por su empinada estructura que lleva hasta la Puerta del Zodiaco Sacra di San Michele donde solían resguardarse esqueletos antiguos y en la actualidad se conservan tumbas sagradas de monjes.